Tuve esperanza hasta el último momento : Ansioso mi corazón aguardaba.

Richard estaba sin decir nada, conversaba con el Ministro, pero su esposa estaba engatusada con él, era natural, aunque el Ministro no estaba tan mal, a mi parecer, pero obvio carne fresca, siempre es más agradable.

Cómo se comprometieron, los esposos De Ferrari Bocchetti ,se acercaron a la mesa que ocupaba mi familia, saludaron a todos, incluso a Mariana, que siempre asiste a todas la reuniones, ya que es considerada parte de la familia, , sin pensarlo, mi papá los invitó a que ocupen los lugares que estaban vacíos en nuestra mesa. Ellos aceptaron sin objetar , y pasaron a compartir con nosotros el resto de la noche.

La tertulia giró en tono, a las donaciones, que habían realizado, luego se pasó al terreno familiar, los padres de Gaby, estaban en Italia, de vacaciones, los padres de Richard, los habían acompañado, para conocerse más, me pareció interesante, é irónicamente dije : Mientras no se les ocurra hacer una orgía normal, la mesa rompió en carcajadas.

Empezamos a bailar, al menos traté de hacerlo, mis dos mujeres : Gaby y Eli, no dejaban de matarse con la mirada, se hacían unas muecas terribles, por dentro me cagaba de la risa, pero no decía nada, para evitarme disyuntivas, saqué a bailar a ambas, en diversos momentos, pero obviamente le di preferencia a mi mujer.

Richard intentaba hacerlo pero se veía patético, en cambio yo, era el rey de la noche, incluso llegué a bailar una guaracha con la esposa del Ministro, todo estaba yendo bien, a eso de las 4am, me aburrí y decidí irme, con mi mujer, me despedí de todos, Gaby se quedó impactada por la manera tan abrupta de despedirme, la cogí de la cintura y le dí un beso, todos me miraron, para salvar la situación dije : Éste es el beso que te debía por no haber ido a tu casorio, me despedí también de su marido, le di un apretón de manos y un abrazo, como para apaciguar las aguas, él me dijo al oído : Te veo en el baño.

Me dio curiosidad su propuesta pero no iba a aceptarla, me puse el saco, y de la mano de mi mujer, salimos, mi mamá me dio la llave de su camioneta, ellos irían en la de mi papá, según me dijo, así que no había problemas, antes de irme, vi a Richard entrar al baño, así que inertemente lo seguí, le dije a mi mujer : espérame en el auto, ya voy.