Ya he vuelto por ahí..(Parte 1)

Ayer retorné al mismo video de Lince, ayer sucumbí ante el deseo de estar junto a un cuerpo extraño, de un arrecho empedernido como yo, que busque lo mismo, placer y solo placer.

Al llegar no divisé a nadie conocido (mejor para mí) me instalé rápidamente en el cuarto oscuro – como quién viene y se va- al poco rato pude divisar entre las siluetas que se asomaban a un individuo interesante – a mi gusto.

No pasó mucho rato para que éste se acércase a dónde me encontraba, nos tocamos, me quiso besar, olía horrible, yo me estaba masturbando cuando Bruno (así me dijo que se llamaba) me cogió la pinga. Me la chupó un buen rato, pero su olor era insoportable y no conseguía por nada que se me parase.

Al recogerse del suelo me preguntó si me pasaba algo, no quise decirle el motivo principal de mi imprevista impotencia, no dije nada guarde silencio. Esperé a que se vaya, pero continuó parado junto a mí, me tocó el trasero, me dijo al oído que le gustaba, no respondí nada. Olía horrible.

Sigilosamente me aparté de él, mientras me iba subiendo el jeans, pude perderme sin problemas entre el variopinto gentío que estaba acaparando el estrecho cuarto oscuro.

Fui rápidamente al baño a lavarme las manos y a tratar de sacar su olor de mi nariz, tuve que echarme un poco de colonia que siempre llevo de emergencia, ya que no me sentía bien, estaba un poco asqueado, pero era la consecuencia de querer toquetear a un completo desconocido que como yo pretendía saciar sus bajas pasiones, con la oscuridad como cómplice.

Al abrir la puerta del baño, un sujeto irrumpió iracundo sin dejar tiempo a que salga, cerró la puerta - no pude reaccionar - me asusté - era un poco más alto que yo, tenía porte militar, era trigueño y calculo que tenia alrededor de treinta años.