No puedo más con esta hipocresía

Hace algunos años atrás, mi vida religiosa o mejor dicho mis creencias, dieron un giro tremendo , al darme cuenta poco a poco, el verdadero siginificado de ser católico.

Profesé la religión católica por tradición familiar, cosa usual en muchos hogares, no fue elección mía, ni mucho menos me dieron opción a escoger, simplemente, me bautizaron, é hicieron que haga mi primera comunión y un montón de cosas más.

Realmente, nunca sentí, algo especial el ser católico, no recibí beneficio de algún tipo, sólo condenarme a terribles sesiones de oraciones y lecturas que consideraban absurdas.

No tengo nada en contra de los catolicos, pues mi madre, mi padre y mis hermanos lo son, simplemente que desde el punto de vista histórico, he podido averiguar , leer, documentarme, ypude darme cuenta de muchas cosas y paso a revelar algunas :

El Papa, o Santo Padre, es un cualquiera cómo todos, con sus defectos y virtudes, no me parece apropiado, que se le atribuya facultades divinas, ú otras similares, ya que ha sido elegido por los hombres, por los cardenales, que cómo sabemos también mueven intereses económicos y políticos.

Son sólo títeres de interéses económicos, y no dan muestra de verdadera sensibilidad hacía los más necesitados.

Me indigna sobremanera, la incongruencia, de lo que se predica, al ver la opulencia en la que está convertida el Vaticano, una ciudad eminentemente turística que mueve millones de dólares al año, para mantener obviamente, al "Sacro Colegio Cardenalicio",mientras millones de niños se mueren de hambre, el "Santo Padre" vive entre paredes de oro, en una riqueza realmente descarada.

La corrupción en la que estan metido muchos miembros del clero, y las constantes denuncias, de abusos sexuales, y en fin toda la porquería que se teje, por la culpa del llamado, voto de castidad, condición arcaica que aún se mantiene ,para poder ser un hombre de iglesia.

Son muchas cosas que han hecho en mí, que realmente me aleje raudamente de la religión católica, porque realmente es una inmundicia terrible, con esl respeto que me merecen los creyentes.