Soy un gran necio, un estúpido, engreído, egoísta y caprichoso

Alrededor de los 15 años, edad en la que todo adolescente pasa por un estadío de rebeldía, me llegó ,de una manera muy radical y algo altanera, pues para mí, todo era dar la contra, además estaba muy dedicado a la vida nocturna, y no pasaba fin de semana que me perdía en alguna discoteca, de por ahí, el asunto era que vivía por vivir, y no hacía caso a lo que me decían mis papás, pude burlar en muchos momentos de su estresante seguridad y sobre protección pero pude darme siempre las comunes escapadas, total, era la edad.

Pero ello también me trajo, muchos problemas, y muchos peligros, de los cuáles ahora, me siento totalmente responsable de haberlos ocasionado.

Una de mis tantas noches desenfrenadas y muy libertinas, en una discoteca en miraflores, conocí a un chico, bien interesante, era bien hablantín, y sobre todo muy leído, o eso me hacía creer, su conversa era muy culta ,y me sentía bien de charlar con él, pues no me aburría en lo más mínimo, en fin , la pasé bien esa noche.

Pero al pasar las horas de la conversa, empezamos a hablar cosas más personales, y empezamos a cuestionarnos de muchas formas, hasta que el trago empezó a a hacerle ser más sincero de lo normal, y aproveche para conocerlo más.

Me dijo que estaba casado, y que tenía 2 hijas, pero que no era feliz, que tenía un lado , o mejor dicho una opción sexual diferente, yo no le dije nada, lo escuchaba con muchísima atención, y sin pizca de asombro, en fin.

Continuamos bebiendo, yo un vodka y él un vino, y seguimos charlando, mientras los cuerpos frenéticos seguían en la pista de baile, Sergio, cómo dijo llamarse, tenía alrededor de 35 años, tenía buena presencia, y algunos rasgos árabes, luego lo confirmé, pero bueno esas cosas son superficiales.

Yo le conté un poco de mí, además con 15 años de vida, no hay muchos que contar, me sentí en confianza pero no le conté lo pecaminoso y moroboso que me había pasado, no creí necesario hacerlo, pero sentí que quería que se lo contara, había en su rostro una cierta inquietud, más tarde sabría porqué.....