Todos me miran, algunos con envidia pero al final, pero al final todos me amaran

Los demás días fueron interminables para mí, el acoso que sentía de parte de las chicas era terrible, me sentía asqueado de tanta serrana, que venía a mi carpeta con cualquier pretexto, a pedirme mi número de teléfono o llevarse quizás de premio consuelo mi correo electrónico. Obvio que elegantemente se los negaba.

Era incómoda esa situación, detesto la gente adulona, y arribista, pero en ese salón ya era el colmo, el centro de la atención era yo.

Cada vez que se armaban grupos de trabajo, sin yo pedirlo, me incluían en casi todos, al final me quedaba elegir, pero no lo hacía por nadie en especial, sólo en dónde veía alguna cara agradable, nada más.

Un tiempo estuve viniendo con gorro, para ocultar mi cabello rubio, incluso pensé teñirme de negro, para pasar inadvertido, pero al final no lo hice, nunca perdí mi identidad, a pesar de aquellos contratiempos, pude sortear y poner en su sitio a las aguantadas y a los faites.

Los chicos también me agarraron de punto, comentaban ,que era un creído y maricón pues, no me juntaba con ninguno de ellos, además objetaban mi cabello rubio, mis ojos verdes, mi forma de vestir, mis modales refinados, la rica fragancia que despedía al pasar, mi celular último modelo, mi camioneta plateada, que la descubrieron una vez llegando al a U, cuándo la estacionaba, y muchas cosas más, por un lado tenía a las chicas embobadas por mí, y por otro lado a los faites del salón en contra mía . Igualados.

Las chicas me defendían pero los chicos me atacaban , yo no decía nada los ignoraba, hasta que un día un serrano me buscó la boca, pues me dijo : gringo maricón.

Me paré fui a su asiento, lo empujé y le dije :

Para comenzar, tú no eres nadie para decirme que soy maricón, yo no me voy al baño, con el serrano de tu costado y no me meto juntos, de dos, al privado, para comenzar, cosa que tú si haces, pues te han visto varias personas, creído no soy, tengo clase que es otra cosa, tengo modales, y sin eso me hacen ser creído , lo soy, no me molesta el decirlo.

Segundo : Si te molesta o tanta envidia te da, mi cabello, mis ojos, o mi apariencia física, pues opérate, tiñete el pelo, y cómprate lentes de contacto, así quizás puedas tener la atención de las chicas, pues parecerte a mí jamás, aunque vuelvas a nacer.

Tercero: No me interesa ser amigo de nadie, no me interesa y se lo dije, mirándolos a todos, yo no he venido a buscar amigos, tengo amistades que no son cómo ustedes, sino cómo yo, gente de otro nivel, así que ahórrense sus atenciones para conmigo, no las quiero, no las necesito.

Cuarto : Si quieres pelearte conmigo , dime en dónde y cuándo, pórque me ves gringuito que crees ¿ , que no sé pelear ¿ estás bien huevón, el hecho que seas de los suburbios de Lima no quiere decir que seas mas matoncito que yo , mídeme y te darás cuenta, y eso va para todos.

Quinto : No soy mejor que nadie, pero si soy muy diferente que todos los de aquí, y si estoy aquí es porque quiero estudiar, nada más, entendiste ,Serrano de mierda ¡¡¡¡¡¡

El serrano ése no me dijo nada, yo estaba furioso esperando su reacción, pero ni se inmutó, se sentó, y todos me quedaron mirando, desde aquel día, nadie en el salón me volvió a hablar, ni chicas ni chicos, fue un triunfo para mí, no me afectaba en lo más mínimo.

Comencé a hacer mis propias amistades pero con chicos y chicas de otros ciclos superiores, gente que fui conociendo poco a poco, personas que tenían algo de similitud con mis expectativas físicas, pareceres y costumbres.

Pero no duró mucho, en diciembre de aquel año, estando ya en 2do ciclo, decidí cambiarme de carrera, pues ya estaba aburrido, así que salí de la UNMSM, sin más ni más, no podía soportar a la gran masa de arribistas que habían allí, no todos pero el 98 % si lo eran, yo estaba asfixiado, me estaba muriendo de alergia, esa era la verdad.

Así acabó mi periplo en la decana de América, tan rápido como volando.

5 años después no extraño a nada ni a nadie.